10 de març, 2006

La canción del viernes (20) “You make it easy” de Air per Peix

¡Feliz viernes!



Las revistas de tendencias llenan páginas con notícias y reportajes de nuevos grupos que supuestamente asaltan la actualidad y sacuden el mercado con aportaciones revolucionarias. Buscan un relevo generacional para las transgresiones de otros artistas que esgrimieron con mucha intención durante los sesenta y los setenta. Dejando de banda que muchas de éstas tienen un valor incalculable, porque son las únicas vías de expansión que tienen los nuevos grupos que se abren paso entre la jungla, ya que las radios están más por la labor de pinchar los revivals de otras décadas (apostando sobre seguro pero abandonando el pulso musical de las inquietas ciudades del país) que por la de promocionar los nuevos trabajos, dejando de a un lado todo esto, los redactores de tales publicaciones están enfermos de renovación. Hay que buscar el movimiento continuo. Pero esto, pese a ser necesario, les confunde y les desmerece en la mayoría de sus reportajes. Hoy en día, si quieres que algo sea “moderno”, ponle algo de samplers y ya tienes medio reportaje ganado. Sin faltar a la música electrónica, es lo que está aconteciendo en los últimos tiempos, el prestigioso movimiento de la música electrónica marca el compás del progreso. Pero de aquí a que cualquier cosa que suene a sintetizador del siglo XXI sea sublime hay un buen trecho.

Los sonidos digitales han llegado hasta la paleta de colores del pop (muy permeable, por cierto, a este tipo de experimentos). Buena muestra de ello es el fenómeno “Air”. Este dúo formado en París, tiene la razón de su éxito en ese increíble matrimonio que han sabido celebrar entre el pop y la música electrónica. Jean Benoit Dunckel y Nicholas Goudin, los dos nacidos en Versalles, graban su primer disco, “Moon Safari”, de donde extraemos la canción de este viernes, “You make it easy”, en 1.998. Rápidamente, las repercusiones del disco no se hacen esperar. Si bien su música no es propiamente innovadora y transgresora, si que responde a un compendio de savores y intenciones. En “Moon Safari” la pareja francesa lleva el pop y la chanson française allá donde nunca antes había estado. A su música no se le puede denominar como auténtica electrónica, ya que una sensibilidad dogmática les evita samplear indiscriminadamente todo tipo de instrumentos. Y esto es clave para sonar un poco retros y modernos a la vez, en fin, lo que sueñan la mayoría de los DJ’s que trabajan en los club lounge.

Esta canción, intrepretada por la delicada voz de Beth Hrisch, es, tal vez, una de la más bellas de un álbum “diez”. Un trabajo que nos lleva de los típicos cafés parisinos hasta los paisajes imaginarios más sofisticados y anhelados, evocando mil texturas y degustaciones. Los Air son opulentos, harmoniosos, elegantes y frescos, una marca diferencial respecto a otros grupos de música electrónica francesa. El LP, con mucha repercusión en Francia y moderada en el resto de Europa, deja paso a “The virgin suicides” (banda sonora de la película de Sofia Coppola, más tarde volverían a colaborar con ella en “Lost in Translation”), el oscuro y experimental “10,000Hz Legend”, la colaboración con Alessandro Baricco “City Reading (Tre story western)”, y por último el aclamado“Talkie Walkie”.