08 de maig, 2013

Diario de Jack Murphy (el de la ley de Murphy) por el camino de Santiago (entrada #21).

Entrada 21. 

Al ir al hotel donde pretendíamos dormir, hemos preguntado si tenían habitaciones y cuanto costaban. Entonces ha entrado otra pareja. La chica, sin ver la habitación ni reparar en gastos, ha clamado: “Nos la quedamos”. Indignado por tal comportamiento, la he golpeado salvajemente con la fuerza de mi odio. Su pareja se ha interpuesto y he visto que delante de mi tenía a un combatiente a mi altura. Ha comenzado un duelo de titanes a golpes de odio puro, fúria irresistible y algún que otro collejón supremo. Como suele ocurrir en esto casos, el hotel por el que nos peleábamos, el vecindario y varios quilómetros a la redonda han quedado devastados, víctimas involuntarias de semejante choque. Una pena, porque por lo visto quedaban habitaciones libres para todos...