Feliz viernes,
Toda canción quiere transmitir un discurso, evocar paisajes y emociones. Habrá misivas más o menos interesantes, pero el autor desea, y debe, transformar la realidad aportando su obra, su punto de vista. Los mensajes de las canciones pueden ser complejos y sugerentes, o tal vez divertidos y banales, a partir de aquí, barra libre; cada artista decide. Hoy nos sumergimos en la canción-denuncia. Los versos, de este tema de Peter Gabriel, exceden las fronteras del placer musical para plantearnos una cruda revelación de la verdad; para comprometerse políticamente con un momento. Esta valentía, que muchos otros esgrimieron antes y después, se desencadena con estremecedora contundencia en este himno africano.
El tema narra los hechos que produjeron el asesinato de Stephen Bantu Biko. Activista político y co-fundador del Movimiento de Conciencia Negra (BCM), fue detenido por la policía en diversas ocasiones hasta que, el 12 septiembre de 1.977, falleciera a golpes en una prisión sudafricana. Convirtiéndose, de esta manera, en uno de los muchos mártires de la causa anti-Apartheid. Esta política inhumana, que el gobierno de Sudáfrica ejecutó hasta 1.990, produjo una de las tantas y salvajes segregaciones raciales del continente africano. Por fin, en 1.997, cinco agentes de policía reconocieron, ante la Comisión de la Verdad y Reconciliación, haber cometido el asesinato de Stephen Biko. Las súplicas por la justicia y la verdad de este horroroso crimen nunca dejaron de escucharse en el país de los asesinatos en la sombra y las desapariciones arbitrarias.
La canción se incluye en el magnífico tercer larga duración de Peter Gabriel en 1.980. La carrera en solitario de este músico nacido en Londres, se inicia a finales de los setenta después de haber abandonado la legendaria formación de Genesis. Con ella había había compuesto algunas de las obras más reconocidas de la música contemporánea. Entre ellas podemos destacar: “Selling England by the pound” y “The lamb lies down on Broadway”. Con su emancipación llegó la libertad necesaria para plasmar sus inquietudes musicales. Se caracterizó por ser un insaciable explorador de nuevos sonidos y ritmos, elaboró, junto a los arriesgados Robert Fripp y Bob Ezrin, auténticas joyas de la música rock. Este tercer disco, descartado en la industria norteamericana por considerarlo un “suicidio comercial”, ponía las bases de lo que deberían ser sus más grandes éxitos de público y critica: “So” y “Us”. Gabriel se comprometió con causas sociales y críticas, colaboró con Amnistía Internacional y fundó el Festival WOMAD (World of Music and Dance), para exponer, a través de la música y la danza, la riqueza cultural del planeta. “Biko” forma parte de la banda sonora de nuestras vidas. Como una luz que se resiste a desfallecer y una llama que se dilata, poco a poco, en nuestras conciencias.
4 comentaris:
La cançó és xula. L'hauria d'aconseguir...
D'alguna manera.
No te la descareguis de l'emule, que aqui estem en contra de la pirateria.....
La piratería es un delito.
AHORA LA LEY ACTÚA
Sí, la pirateria deu ser un delicte, suposo. Gravar-te una cançó que escoltes a la ràdio no ho és, però (encara que la conseqüència sigui la mateixa, més o menys).
De totes maneres, cobrar 20€ per un CD que a ells els costa menys d'1€ també hauria de ser delicte. O com a mínim, que no plorin, pobrets, com si fossin uns angelets innocents que viuen arraconats pels pirates endimoniats! I que no posin els artistes com a excusa! M'agradaria saber quina part del preu es queden realment...
Això és la meva opinió al respecte. I ho diu una persona que tota la música que té és comprada i de propietat!
Per cert, si algú ho vol sentir li puc deixar el disc (no per copiar-se'l, és clar, això seria pirateria) de Manu Dibango: "Wakafrica", a on hi ha una versió brutal d'aquesta gran canço: "Biko".
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